Largas horas para el Corpus de Pravia
Los voluntarios que decoran las alfombras de flores trabajan contra reloj para la festividad que se celebra mañana
L. S. N/Pravia
Con las calles del centro cortadas al tráfico, Pravia se prepara para celebrar la procesión del Corpus con la villa engalanada de alfombras. Han sido muchas las manos que llevan meses trabajando para que mañana los pravianos puedan disfrutar de una tradición que llegó al concejo hace algo más de una década y que se ha asentado, aportando vistosidad a la celebración religiosa. Los tres equipos encargados de montar las alfombras en la calle San Antonio, en la Colegiata y en la plaza del Ayuntamiento comenzaron a trabajar hoy después de comer, para completar un complejo puzzle que requiere mucha destreza y paciencia. La concejala de Medio Rural, Charo Cuervo, dirige el equipo que montó las alfombras de sal teñida que decoran la calle San Antonio. Hay que colocar las plantillas, ya decoradas, que encajen perfectamente entre sí y conseguir que luzcan como una sola pieza. Pepe, uno de los voluntarios, se encarga de dar el toque final, prensando con cuidado las planchas de colores, que hacen dibujos geométricos o el peculiar dibujo del escudo, con sus cuervos perfectamente delineados, uno de los diseños de los que más orgullosa se muestra la concejala.
Un poco más allá, en la Colegiata, los voluntarios se enfrentan a una dificultad añadida, el viento, que complicó durante toda la tarde el montaje. Y es que en la colegiata no se usa sal teñida, sino virutas de colores y pétalos de flores, que vuelan y se descolocan fácilmente con el aire. Se trata del montaje más complejo, y el coordinador del equipo, Emilio Álvarez Vara, preveía a media tarde que el trabajo se prolongara hasta la madrugada. “Estos últimos días son de locura, trabajamos de la mañana a la noche, casi sin tiempo para comer”. En un local cercano, voluntarias como Maribel, Fifa, Marta, Trini o Domi van preparando las decoraciones finales, que los operarios municipales transportarán a la cercana colegiata para que un segundo equipo componga el puzzle y dé los últimos toques. Llevan trabajando desde febrero, como la catequista Celia García González, encargada de la decoración de la plaza del Ayuntamiento, que al final de la tarde ya estaba completamente montada. Todo, para que Pravia disfrute mañana de la procesión y la celebración del Corpus por todo lo alto. “Y, sobre todo, que no llueva”.