“La plaga de la patata es la puntilla al campo”, lamentan los paisanos
El director general de Desarrollo Rural, Jesús Casas, informó hoy a los vecinos de la prohibición total de siembra en Pravia y Muros de Nalón
F. Romero/Muros de Nalón
“Es la puntilla para el campo. Ya hay poca gente que siembre, y con esta prohibición va a acabar siendo todo monte”. Este es el sentir mayoritario expresado hoy por los vecinos y vecinas que acudieron a las charlas sobre la prohibición de siembra de patatas que se celebraron en Pravia y Muros de Nalón, impartidas por el director general de Desarrollo Rural, Jesús Casas. Los vecinos destacan que “nunca se vió nada así, había hongos y cosas que se podían sulfatar. Prohibir y arrancar las patatas, y además durante dos años, va a hacer difícil que la gente recupere los cultivos, porque la mayor parte somos ya mayores, pocos jóvenes se animan”, señalan algunos de los afectados, de Muros, donde sólo se detectó un ejemplar en una trampa, pero donde se ha decidido la prohibición por cautela, ya que se trata de un insecto con muchísima capacidad de reproducción: hasta 500 crías de un solo ejemplar.
Los casos de Pravia y de Muros son muy distintos. Pravia registra, junto a Cudillero, el brote más virulento de polilla guatemalteca, con el 40 por ciento de todos los insectos atrapados en las trampas colocadas por los técnicos de la consejería. En Muros, sin embargo, sólo se detectó un insecto. Hasta ahora, se establecía la restricción a la siembra en un kilómetro cuadrado del punto en el que la trampa había dado positivo, ya que se creía que esa era la distancia máxima que volaban las polillas para encontrar alimento, pero esa medida no ha impedido la propagación de la plaga. “Resulta que pueden volar más, hasta tres kilómetros, y aprovechar además los vientos. Si no encuentran alimento, se esforzarán en buscarlo”, asegura el director regional, Jesús Casas. En el caso de Muros, “hemos decidido prohibir la plantación porque hay un positivo, y el concejo es tan pequeño que no merece la pena suprimir en una zona sí y en otra no”.
El caso de Pravia es singular, por la virulencia del brote, cuyo origen además estaba sin detectar. “Desde que se declaró la plaga, localizamos 2.400 mariposas, y 900 de ellas han sido detectadas entre Pravia y Cudillero. Es un brote de almacén, no de plantación, porque no hay patatas plantadas en el entorno. Hemos hecho una labor ardua, auténticamente detectivesca, hasta dar con los dos almacenes particulares donde estaban las patatas infectadas”. Eran patata para uso particular o siembra, de productores de autoconsumo. “Hemos ido casa por casa hasta encontrarlos. Los propietarios dicen que siempre hubo bichos. Sí, pero no éste bicho”. El brote se dió en el entorno de Villamuñín.
La estrategia es dejar a la polilla guatemalteca sin alimento, y así impedir la propagación de una especie capaz de tener 400 o 500 crías de una sola mariposa. En principio, la decisión afecta sobre todo a agricultores no profesionales, a vecinos que plantan para autoconsumo. “Avisamos con antelación para que los profesionales puedan optar por otro tipo de plantación en vez de patata. No queremos una desagradable sorpresa en febrero, de tener que levantar plantaciones por la presencia de polilla. La decisión da más seguridad a todos, y además está en consonancia con lo que indica la Unión Europea y las medidas que se están adoptando en Galicia”, concluye el director general de Desarrollo Rural.