El Gobierno anuncia ayudas para enterrar el purín y el cucho
La nueva normativa tendrá un plazo de adaptación de un año, durante el cual se podrán negociar excepciones, y la ministra advierte de que si no hay adaptación puede optarse por “sacrificios de ganado”
Redacción/Pravia
El Ministerio de Agricultura concederá ayudas a los ganaderos para que se adapten a la nueva normativa de gestión de purines y estiércol, que obliga a enterrar el cucho y a inyectar en la tierra el purín para abonar el campo. La norma, que ha puesto en pie de guerra a los ganaderos asturianos, que tendrían que desembolsar hasta 32.000 euros por ganadería, según estimaciones del sindicato COAG, pretende reducir las emisiones de amoniaco y otros gases a la atmósfera.
La ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Isabel García Tejerina, anunció ayer durante la visita a las instalaciones de Central Lechera asturiana que próximamente se lanzará una línea de ayudas y un año de prórroga para adaptar la maquinaria de esparcir los purines a la nueva normativa para el abonado con purines a las que obliga la normativa comunitario para reducir las emisiones de amoniaco y de otros gases.
Con las nuevas modificaciones, si los ganaderos quieren cobrar las ayudas directas de la PAC no pueden esparcirse los purines con cisternas con sistema de plato o abanico ni cañones, lo que exigirá nuevos dispositivos que permitan depositar los purines a corta distancia de la tierra. Esto ha provocado malestar en todo el sector, especialmente el vacuno de leche, ya que considera que está pagando el incremento de las emisiones de amoníaco del sector porcino, cuya cabaña ganadera se ha disparado en España en los últimos años, especialmente en comunidades como Cataluña o Aragón.
Asimismo, los estiércoles deberán enterrarse también en el menor tiempo posible (menos de 24 horas) para reducir la emisión de gases a la atmósfera.
Ante estas nuevas exigencias, la ministra ha afirmado que su departamento “va a sacar una convocatoria de ayudas para cambiar la manera de esparcir los purines” ya que España supera los niveles de amoniaco “en una cantidad importante y más del 90 por ciento procede del sector agrario”, principalmente del sector porcino.
Las Comunidades podrán establecer excepciones durante este año
Tejerina aseguró que la nueva normativa sobre purines es “inevitable” y advirtió de que “debemos hacer las mejores practicas para evitar que pase por ejemplo lo que ha pasado en Holanda que se han tenido que sacrificar vacas por cuestiones medioambientales. Nosotros no queremos llegar a sacrificar vacas sino que tenemos que seguir creciendo pero eso requiere apostar por las mejores prácticas y las más sostenibles”, ha indicado la ministra.
Además, recordó que “durante el primer año prevé excepciones que deberán regular las comunidades autónomas” para la aplicación de esta normativa. La consejería de Desarrollo Rural ya ha anunciado que presentará alegaciones.
Me parece muy bien lo que dice la señora ministra de el amoníaco que sale a la atmósfera,pero la unión europea también exige a España que el gasto de calefacción sea individual y no colectivo para poder disminuir el efecto que provoca el despilfarro en algunas comunidades de vecinos que tienen la calefacción con las ventanas abiertas,y aún no sé logró y eso que es obligatorio desde el año pasado.
Siempre pagan los platos rotos los mismos