La Iglesia busca un convenio con Cultura para concluir la Colegiata
Tras finalizar las obras de la torre, el Arzobispado pretende poner en marcha cuanto antes una segunda fase para la cubierta del templo
F. Romero / Pravia
Con la torre ya protegida del agua y la humedad y lista para aguantar otros 50 años ahora la Iglesia persigue una segunda fase para renovar la cubierta integral del templo. “Queremos hacerlo lo más pronto posible porque el proyecto ya está hecho” explica Miguel Ángel García Bueno, que además de párroco ejerce de “asesor de obras”. El Arzobispado pretende llegar a un acuerdo de colaboración con Cultura para financiar los cerca de 200.000 euros que costaría esta nueva fase. Incluye el cambio de toda la cubierta, en donde hay zonas con mucha humedad, y la consolidación de las cabezas de viga, muchas de las cuales carcomidas y que requieren una intervención urgente.
García Bueno se muestra satisfecho con la restauración de la cubierta de la torre. “Ahora solo falta que tengan un poco más de cuidado con el entorno, que es conjunto histórico y la colocación de instalaciones en fiestas deja el suelo deteriorado y sucio”, explica.
La obra no solo deja la torre preservada, sino que evita un mayor deterioro de los yugos de las campanas una de las cuales (la norte) estaba ya muy afectada y podía suponer un peligro. Ello obligó a intervenir en sus ejes. Además, la restauración de la cubierta evita que arrolle el agua por fuera de la torre, eliminando esas manchas negras de humedad que ahora ya no están y que habían dado una imagen característica a la Colegiata de antes de la actuación.
“Han llevado a cabo un trabajo exquisito, pese al mal tiempo que hemos tenido”, explica el párroco. El tipo de tejado que se ha instalado es un modelo muy avanzado, “ventilado” con doble capa fijada a tornillo sobre las vigas y sobre ellos teja árabe, también fijada a parte del alero. Esta primera fase finalizó con algún desajuste en el presupuesto (unos 12.000 euros) por imprevistos, sin embargo, destaca García Bueno, ha habido una buena colaboración tanto del Ayuntamiento como de los propios parroquianos que ha hecho viable la mejora de la torre.